miércoles, 29 de abril de 2009

9am 11am 5pm 11pm 3am


Escuchas música, te sientas en el suelo, lees un libro y estoy en un papel que te escribí
yo estoy humedeciendo aún el lado derecho de tu cama de lágrimas que no ves.
Tu estás caminando por las calles que yo no piso ni en sueños,
yo estoy sentada aqui, tan lejos de ti pero contigo en mis ojos llorosos.
Pasas clases, miras fotos, saludas a tu dueña de casa,
yo me la paso sentada, imaginando que te tengo, recordando que no estás.
En tu mochila guardas una calculadora y unos textos, y un envoltorio de galletas,
en mis bolsillos sólo tengo el ayer, mi fantasma que se llama como tu, olor marchito,
en mi alma sólo tengo tú,
tu que no sabes que yo he visto amaneceres a tu lado, mientras tu dormías,
tu que ignoras que en mis retinas se moja tu ayer en la noche, en el día
tu que aun no sabes que todo mi quebranto me lo he parido al verte marchar.
Miras rostros a diario, lees un artículo de verdes,
yo mastico chicle a la lejanía,
a ver si así consigo enjuagar mi dolor en un pedazo de plástico azucarado.

Pasas flotando por el mundo, con los ojos risueños, con tu piel de cielo,
todo tu, tan llenito de gloria
y yo, -¡ay de mi!- yo tan acongojada con tu caricia pasada.
Yo tan arrugada de los abrazos que no te dí,
yo tan mordisqueada por el tiempo,
tan pegada de poemas que no te dí;
tan llevada y traída,
¡pobre de mi!
yo toda, tan sin tí...



A Daniel

1 comentario: